En el comedor del castillo el Conde y la Condesa cenan. La Condesa parece preocupada y al mismo tiempo atraída por el Administrador, del cual, a causa de su frío carácter, se cree que es el Diablo. En los sótanos del castillo hay una habitación abandonada, donde el padre del Conde solía torturar a los siervos infieles. Empujada por la curiosidad, la Condesa pide al Conde visitar la cámara de torturas. Salen.
El Administrador entrega el plano del castillo a los enemigos del Conde. Cae la noche.
Al día siguiente la Condesa está en su boudoir con el Administrador. Ella le describe la cámara de tortura que visitó la noche anterior. Cuando el Administrador se acerca para besarla, ella lo rechaza: si, como se dice, él es verdaderamente el Diablo, debe darle a cambio de una noche de amor la vida y la belleza eternas. Ellos sellan el pacto besándose. El Conde ve todo.
A partir de este instante, todo parece recomenzar. Se vuelve a ver al Conde y la Condesa cenar, repetir los mismos diálogos, dejar el comedor para visitar la cámara de tortura. Se vuelve a ver al Administrador dar el plano del castillo a los enemigos del Conde. Cae de nuevo la noche.
Cuando en los sótanos la Condesa se acerca al Conde para besarlo, él la empuja dentro de una jaula que hay en la cámara de tortura, con la intención de torturarla a muerte. En el mismo instante, se oyen ruidos provenientes de la parte alta del castillo. El conde se asegura de que la cerradura de la jaula esté bien cerrada y sale, dejando encerrada a la Condesa.
Aparece el Administrador contando cómo los enemigos del Conde, gracias a su colaboración, atacan y penetran en el castillo, y cómo matan al Conde y a sus siervos sin lograr encontrar a la Condesa. Ella obtuvo la vida eterna, pero está condenada a quedar encerrada en la jaula para revivir eternamente su pecado.
Se ve una vez más a la Condesa dialogar con el Administrador en su boudoir, proponerle un pacto y besarlo bajo la mirada dolorida del esposo. Las mismas cosas se repiten.
Tiziano Manca
La Gabbia (La Jaula)
Ópera en un acto
Música
Tiziano Manca
La Condesa
Stephanie Field, mezzosoprano
El Conde
Martin Nagy¸ tenor
El Administrador
Daniel Gloger, contratenor
Su doble
Andreas Fischer, bajo
NewEars.ensemble:
Dirk Altmann, clarinete
Nicola Miorada, clarinete / clarinete bajo
Boris Müller, percusión
Simona Riniker, violín
Paul Pesthy, viola
Eric Borgir, violoncello
Florian Hölscher, piano
Escenografía, iluminación y vestuario
Oria Puppo
Dirección
Alejandro Tantanian
La Gabbia es una coproducción de Akademie Schloss Solitude, Stuttgart / Musik der Jahrhunderte, Stuttgart / Lille 2004 – European Cultural Capital / Opera de Lille.
Duración: 45 minutos
Estreno mundial: 30 de marzo de 2004, Theaterhaus, Stuttgart, Alemania
Presentaciones posteriores:
Abril de 2004: Opera de Lille, Francia